Salmos de Protección

Los salmos de protección son una de las mejores de formas de pedir la intercesión de Dios por nosotros, para que Dios esté a nuestro lado en los mejores instantes y nos ayude en los peores momentos.

Los salmos de protección se deben llevar a cabo con toda la fe posible porque si no hay fe no hay protección ya que la protección es consecuencia directa de nuestro amor hacia Dios, por eso, ese amor debe ser incondicional y sin ninguna duda ya que Él dió su vida por tí o mí sin esperar nada cambio.

Dios nos acompaña en cada momento de nuestra vida y sus enseñanzas nos deben servir de inspiración para llegar a Él. Nos lo recompensará con su protección y compañía.

En los más de 100 salmos que existen, exactamente 150 salmos, hay dos que representan la esencia de los salmos de protección, son el salmo 17 y el salmo 91.

 

Salmos de Protección

 

Estos salmos se llevan usando para este fin desde tiempos inmemorables de tal forma que esa tradición se ha conservado hasta la actualidad sin perder su poder.

La tradición dice que la protección, va acompañada de fe, o lo que es lo mismo, protección y fe son un sólo elemento indivisible y poderoso que hará posible que la esperanza llegue a tu vida en momentos más complicados.

Seguro que te habrás preguntado como es posible esa protección, pues la respuesta es muy sencilla a través de la justicia que imparte Dios. El es incapaz de dejarte sólo en los peores momentos, te acompaña, te quiere,  te da abrigo cuando hace frió  y te da cobijo a su lado cuando te sientes abandonado.

Lee atentamente los salmos 17 y 91, aprende de cada línea, de cada palabra porque la verdad está en la sabiduría que David reflejo en cada escrito porque Dios estaba a su lado como lo está al lado tuyo.