Misterios Gloriosos (miércoles y domingo)

Descubrimos los misterios gloriosos a través de la cultura, el arte o la simbología religiosa ya que se suele asociar al cristianismo a Jesucristo crucificado, detrás de ese momento hay mucho más ya que ¡Jesús ha resucitado!.  El rosario expresa esa creencia mediante la fe, ayudando al cristiano a vencer la oscuridad de la Pasión para centrarse en la Gloria de nuestro Señor y fijarse en lo que realmente importa, su propia Resurrección y posterior Ascensión.

Fruto de la contemplación de Jesús Resucitado, el cristiano encuentra de nuevo los motivos de la nueva fe, como así lo atestigua la Biblia, en la 1ª epístola a los corintios del Nuevo Testamento, versículo 1 corintios 15 y 14, recordando la alegría de María que sintió al comprobar la nueva vida de su propio hijo glorificado.

Rezar el Rosario es mucho más que recitar una simple oración, se trata de realmente detenernos a pensar y meditar luego de cada misterio o momento de la vida de Nuestra Madre y de Nuestro Señor. Esa pequeña pausa que hacemos en nuestra cabeza nos sirve para agradecer, pedir perdón y, sobre todo: entregarles nuestro corazón.

Rezo de los Misterios Gloriosos (miércoles y domingo)

Los misterios gloriosos se rezan únicamente los miércoles y los domingos, través de ellos revivimos la alegría y el gozo que sólo seremos capaces de sentir si nos tomamos de la mano de Dios. De ese modo solo vendrán bendiciones a nuestra vida, por muy nublado y oscuro que se vea el camino.

Plegarias  Preliminales

Señal de la Cruz

Credo.

1 Padre Nuestro
3 Aves María
1 Gloria

Misterios Gloriosos del Santo Rosario

Cada misterio tiene un mensaje, es bueno meditarlo y entenderlo.  A continuación vamos a ver cada uno de ellos, acompañado de un breve pasaje.

La Resurrección de Nuestro Señor

«Hubo un gran terremoto, desde el Cielo descendió un ángel de nuestro Señor, se acercó, movió la piedra y se posó sobre la misma. Los guardias se quedaron paralizados con mucho miedo. El mismo ángel dijo a las mujeres: Vosotras no tengáis miedo; ya sé que estáis buscando a Jesús, que fue crucificado. Nuestro Señor ha resucitado, por eso no lo vais a encontrar aquí».

• (pausa para meditar).
• 1 Padre Nuestro.
• 10 Ave Marias.
• 1 Gloria.
• 1 Jaculatoria, por ejemplo «María, Madre de gracia» o la «Oración de Fátima»:

La Ascensión de Jesús a los Cielos

«Fueron muy cerca de Betania, levantó las manos bendiciendo a todos. Poco a poco se fue alejando mientras ascendía al Cielo. Ellos volvieron a Jerusalén con gran alegría y a partir de entonces empezaron adorarle».

• (pausa para meditar).
• 1 Padre Nuestro.
• 10 Ave Marias.
• 1 Gloria.
• 1 Jaculatoria, por ejemplo «María, Madre de gracia» o la «Oración de Fátima»:

La Venida del Espíritu Santo

«Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos los discípulos de Jesucristo reunidos y de repente hubo un ruido como un fuerte viento, llegado del Cielo, que entró por la toda la casa. Unas lenguas de fuego salieron y se posaron sobre cada uno de los discípulos, todos fueron bendecidos por el Espíritu Santo; allí mismo, empezaron a hablar en diferentes lenguas inspirados por el mismo Espíritu Santo».

• (pausa para meditar).
• 1 Padre Nuestro.
• 10 Ave Marias.
• 1 Gloria.
• 1 Jaculatoria, por ejemplo «María, Madre de gracia» o la «Oración de Fátima»:

La Asunción de Nuestra Madre a los Cielos

«Me llamarán bienaventurada por todos los pueblos porque grandes obras ha creado el Señor en mí». «La Santísima Virgen María, una vez que alcanzó el curso de su vida y plenitud en la tierra, a la gloria del Cielo fue llevada en cuerpo y alma, en donde ella ayudó en la gloria de la Resurrección de su Hijo, participando en la resurrección de todos los miembros de Cristo».

• (pausa para meditar).
• 1 Padre Nuestro.
• 10 Ave Marias.
• 1 Gloria.
• 1 Jaculatoria, por ejemplo «María, Madre de gracia» o la «Oración de Fátima»:

La Coronación de María como Reina de los Cielos

«Desde el Cielo llegó una gran señal: una mujer, vestida como un sol, debajo de sus pies había una luna, y sobre su cabeza una bonita corona con doce brillantes estrellas».

«Al final la Virgen inmaculada, se liberó de todo pecado, una vez que acabó el curso de su vida terrenal, alcanzando la gloria del cielo y como Reina del universo fue al trono junto al Señor, para ser conformada más plenamente a su Hijo Jesucristo, Señor de los Señores y del pecado y de la muerte vencedor».

• (pausa para meditar).
• 1 Padre Nuestro.
• 10 Ave Marias.
• 1 Gloria.
• 1 Jaculatoria, por ejemplo «María, Madre de gracia» o la «Oración de Fátima»:

Plegarias Finales

• Rezamos la oracion de la Salve.
• El rezo de las letanías lauretanas son opcionales.

•  Fin Misterios Gloriosos.

Los misterios gloriosos, se encargan de hacernos vivir los momentos más importantes de la vida de Nuestro Señor y de Nuestra Madre, es importante meditar cada uno de ellos al rezar. Podemos tomar a Nuestra Madre como ejemplo y guía para que un día logremos ser bienvenidos al Cielo como ella lo hizo, esa es nuestra meta y debemos alcanzarla.

Muchos simplemente se encargan de repetir las oraciones, pero eso es un error que no se debe cometer. Si quieres realmente sentir todo lo que el Santo Rosario nos ofrece, nuestra Madre y Jesús nos brindan día a día y que muchas veces no logramos ver.

Con solo escuchar el nombre de estos misterios gloriosos, te llenarás de fe y amor porque se demuestra que después de la tormenta, siempre llega la calma. Así como sucedió con Nuestro Señor, quien sufrió y murió para que nuestros pecados fueran perdonados… Pero quien también hoy se sienta a la derecha de Dios y desde allí nos cuida y guía de su mano.

Lo importante de los misterios gloriosos es que tú mismo hagas la conexión con Nuestra Madre y con Jesús, que les pidas perdón, que les agradezcas por interceder por nosotros ante Dios y que les digas cuánto los amas.

Además, los misterios gloriosos nos enseñan que la mejor manera de agradecerle a Dios por tomarnos de su mano y guiarnos por el mejor camino, sin abandonarnos jamás es ser seres humildes, puros, con paciencia y sobre todo tener un corazón lleno de amor, adoración y agradecimiento, tal como era el de Nuestra Madre. Ella sin duda es nuestro mejor ejemplo, por lo que merece esta oración y mucho más.

Si te ha gustado esta publicación, recuerda que nos encantaría saber tu opinión o experiencia. A lo mejor tú has rezado el rosario de una forma diferente y puedes comentarla con nosotros… ¿Te anímas? :).