Alabemos a nuestro Señor por su gloria
1
Alabemos a nuestro, todos los pueblos;
Todas las naciones adorarle.
2
Porque es inmenso su amor hacia nosotros,
Y la lealtad de nuestro Señor será eterna.
Aleluya.
El Salmo 117 la mejor alabanza a Dios
El salmo 117 es una alabanza por la misericordia de Jehová, por su grandeza y por todas sus obras. Es uno de los salmos más cortos pero incluso de los más poderosos que tiene la biblia, es un estimulo constante para agradecer a Jehová por su bondad. El Señor protege al hombre lleno de justicia porque ha llenado su vida de grande esfuerzos y de seguir el camino del bien, debemos unificarnos todos en reconocimiento a Jehová como único Dios y como protector de todos los hombres de la tierra.
Cuando dice naciones, Dios reconoce que hay hombres de diferentes porvenires, con rasgos distintos y aspiraciones distintas, pero con un mismo corazón y ese es alabarlo a él, las naciones a ojos del señor se convierten en una pues es el mismo deseo que los une a todos.
Este salmo nos ayuda a aumentar nuestra fe en el creador, se puede utilizar como una señal de agradecimiento en cualquier momento de nuestras vidas, pues este salmo nos explica que tenemos a Dios siempre de nuestro lado siempre y cuando sigamos sus enseñanzas.
La brevedad del salmo no le quita la gran fuerza que tiene, se puede utilizar para cualquier momento, incluso para abrir y cerrar cada estudio bíblico, además que es fácil de recordar y posee un análisis sencillo: nos ayuda a conectarnos con la fuente divina y se hace en señal de agradecimiento.
Una de las características más fuertes de este salmo es que con pocas palabras podemos honrar al creador de manera correcta, unirnos a él y sentir una gran fuerza renovadora. También por su brevedad se puede escribir en cualquier papel y llevarlo con uno para realizar una oración cuando lo deseemos.
Como dato curioso de este salmo, que posee una característica profética, se puede encontrar una insinuación a esto en el capítulo 15 del Libro de los Hechos del Nuevo Testamento.