Salmo 133

1

¡Observad que bonito  es ver como todos hermanos

conviven juntos en armonía!

 

2

Es igual el magnífico óleo en la cabeza,

el cual baja a la barba,

la misma barba del poderoso Aarón,

y se desliza hasta el extremo de su ropaje;

 

3

como la escarcha  del Hermón,

que baja a los montes de Sion,

porque desde allí envió Dios su bendición,

la vida infinita.

salmo 133

 

El Salmo 133 la mejor alabanza a Dios

Buenaventura del amor fraternal eso representa el salmo 133. Cántico gradual de David, que nos habla de las bendiciones de Dios a sus hijos cuando están unidos en el amor.

¿Cuando estamos en soledad o nos encontramos aislados de nuestros hermanos, Dios envía sus bendiciones?

En este Salmo, David hace dos comparaciones que nos ayudan a entender de qué manera derrama Dios sus bendiciones. El señor es bueno, es bondadoso, nos ama de corazón, por eso infunde en sus hijos la unión por sobre todas las cosas, porque en la unidad esta la bendición de Dios que viene derramada para aquellos que viven unidos y con amor en su corazón; estar en soledad, no agrada a Dios, que quiere que sus hijos estén siempre en unión y en armonía.

Existe una condición para recibir la bendición de Dios y es entender que en la unión está la fuerza, está la bendición y está una vida llena de armonía con todo lo que nos rodea. Ahora bien, ¿Por qué algunos reciben la bendición y otros no? Esto es debido a que se cree que están en unión pero no están en armonía con el prójimo, sino que están siempre en disputas, las cuales no agradan al señor.

La palabra armonía representa unión en todos sus significados y en todos los escenarios posibles, claro ejemplo de ello es una armonía musical, definida como la relación y orden de notas que se refiere a la combinación de diferentes sonidos y notas emitidos al mismo tiempo, es decir, unidas; cabe destacar qué, para que la unión sea de manera efectiva y como Dios manda, es necesaria la armonía, la cual complementa todo sentido de vinculo en el amor de Dios y con nuestros hermanos. El señor nuestro Dios pide a sus hijos unión en el amor y amor a la unión.